Poesía sobre captar la juventud y dejar volar los sueños
Una vez caminé entre cientos de flores y no recordaba la fragancia de la vida. Una vez rocé las verdes ramas de los sauces y nunca sentí la alegría de la juventud. He buscado y buscado, pero no puedo encontrar la inmensidad del cielo y el mar en el futuro. Yo, y tal vez nosotros, nos detuvimos un par de veces, dudando y sintiéndonos tristes. Todos pensamos que ese es nuestro verdadero yo. Hasta que cantemos en el viento frío, hasta que notemos el paso del tiempo, ¿podremos seguir desperdiciando nuestra juventud? Compañeros de clase, dejemos de lado nuestro deseo de vagar por el mundo, dejemos que nuestros pensamientos ya no vayan a la deriva con la multitud, tratemos racionalmente a nuestra preciosa juventud, dejemos que el sudor de los ideales empape nuestra ropa, que el futuro no se arrepienta de esta vez, que La vitalidad nos trae felicidad, volemos.
Adoptarlo