La historia de la fotoelasticidad

El fenómeno de la fotoelasticidad fue registrado por primera vez por el físico escocés David Brewster y desarrollado y aplicado a principios del siglo XX por E.G. Coker y L.N.G. Su libro Tratado sobre fotoelasticidad fue publicado por Cambridge University Press en 1930 y se convirtió en un manual estándar sobre el tema. Entre 1930 y 1940 se publicaron muchas otras obras en ruso, alemán y francés. Al mismo tiempo, se están logrando nuevos avances en este campo y se han logrado un gran número de mejoras y simplificaciones técnicas. El rango de medición de la fotoelasticidad se amplió a la tensión tridimensional y se volvió cada vez más popular, y se establecieron muchos laboratorios de fotoelasticidad. La aparición de polarizadores digitales que utilizan diodos emisores de luz ha permitido monitorear continuamente estructuras físicas bajo carga, promoviendo el desarrollo de la tecnología de fotoelasticidad dinámica. La tecnología de fotoelasticidad dinámica juega un papel importante en el estudio de fenómenos complejos como la fractura de materiales.