Un poema sobre las manecillas de las horas, los minutos y los segundos.
Tengo una casa con un pequeño despertador.
Los ladrillos rojos se utilizan para construir paredes y techos.
El tul amarillo es su preciosa cortina.
En la habitación del despertador viven doce hermanos.
Siempre protegen su territorio con honestidad.
Están equipados con manecillas de horas, minutos y segundos.
Esta es una familia interesante.
Mr. Second Hand se mueve muy rápido.
El tic-tac estaba ocupado dando vueltas en círculos
La señora Minutero no tenía prisa.
Tan ordenados y ordenados
Los bebés en el sentido de las agujas del reloj son como generales en casa.
El segundero y el minutero estaban cansados de correr y lentamente subieron un espacio.
Con un duende travieso.
Ven siempre a mis sueños y llámame.
Déjame jugar con él.
Ding Ning.
Escucha de nuevo.
"Gracias por despertarme, elfo.
Jugaré contigo más tarde
Ahora voy a la escuela." p>