La composición es un poema sobre los padres.
Desde el momento en que el bebé cayó con un "wow" hasta alimentarlo para que creciera, cuánto esfuerzo y sudor dedicaron los padres y cuántos días y noches pasaron desde la escuela primaria hasta la secundaria; , e incluso a la universidad, cuántos El maestro ha trabajado duro para él, dedicándole silenciosamente luz y calor, quemándose e iluminando a los demás.
La gratitud viene del corazón. Como dice el refrán: "La bondad de una gota de agua se paga con un manantial de agua". Es más, lo que te dan tus padres, familiares y amigos no es sólo una gota de agua, sino un vasto océano. Ya sea que les des a tus padres una taza de té caliente cuando están cansados, o les des una tarjeta en su cumpleaños, o les des algunos saludos y consuelo cuando están perdidos, a menudo ellos derraman sus esfuerzos y energía en nosotros, ¿y cómo podemos hacerlo? ¿Recuerdas sus cumpleaños, comprendes su cansancio y notas las hebras de plata y las arrugas? La gratitud requiere que sientas y pagues con el corazón.
La gratitud es respeto. Como científica famosa, Marie Curie había ganado dos veces el Premio Nobel, pero en la reunión se reunió con su maestra de escuela primaria y le expresó su agradecimiento con un ramo de flores. El gran hombre Mao Zedong también expresó su profundo agradecimiento a sus maestros durante el festival. Los grandes hombres desde la antigüedad tienen un corazón agradecido. La gratitud no necesita ser trascendental, sólo necesita un saludo, un llamado y un toque de cariño.
La gratitud es significativa. El amor hace girar el mundo. La dedicación de los padres es mucho más alta que las montañas y más profunda que el mar, pero como nosotros, sólo sabemos abrir la boca para comer y estirar las manos para vestirnos. Parece que hay otra zona de aislamiento, que nos hace volvernos egoístas, olvidar las aportaciones de nuestros padres y olvidar la voz de la felicidad. Aprender a apreciar a los demás es una especie de conciencia y una especie de piedad filial, porque sólo así. ¿Puede haber armonía y felicidad? Cuando hay felicidad, habrá respeto mutuo.
Con un corazón agradecido, mira a la sociedad, a tus padres y a tus familiares, y descubrirás lo feliz que eres. Abre tu mente y deja que la llovizna se lleve la contaminación de tu corazón. Aprenda a ser agradecido, porque esto hará del mundo un lugar mejor y la vida más plena.