Cuanto más atiendas a los demás, menos te tomarán en serio. ¿Cómo debemos comunicarnos con los demás?
Cometí este error una vez. Porque soy muy tímido y tengo baja autoestima, pero también quiero ganar buena popularidad, siempre atiendo a los demás inconscientemente. Pero cuanto más hago esto, más. Más hago sentir mal a la otra persona. Más tarde, me di cuenta de que en la comunicación interpersonal, uno debe tener confianza en sí mismo y mantener sus propios principios. Es bueno ser amable con los demás, pero no se puede complacer demasiado a la gente, de lo contrario se convertirá en un halago.
Las personas como yo tenemos una típica "personalidad complaciente". Si quieres tener una relación interpersonal saludable, primero debes hacer cambios dentro de ti mismo. Cuando me doy cuenta de que claramente no estoy de acuerdo con lo que dice la otra persona, pero quiero atenderlo, inmediatamente me callo y permanezco en silencio, y nunca digo nada que vaya en contra de mi corazón. De hecho, no es tan difícil como todos piensan. Cuando lo logras una vez, descubrirás que se siente genial ser tu verdadero yo. En segundo lugar, debes cultivar tu propia confianza en ti mismo. Todos son independientes e iguales, ¿por qué deberías intentar ganarte el favor de ellos? Afirma más a menudo tu propio valor, “soy excelente”, “soy el mejor”. Poco a poco, te atreverás a expresar tus diferentes opiniones delante de los demás, en lugar de limitarte a atender estúpidamente. Y en este momento, también descubrirá que todos lo valorarán y permitirá que todos vean sus talentos, especialmente en el lugar de trabajo, y su jefe lo apreciará más rápido.
En la comunicación interpersonal, debes tener tus propios principios. Si la otra persona te obliga a hacer algo que no te gusta, entonces debes seguir tu corazón y decir "no". No hay nada de qué avergonzarse. Ayudarlo es una cuestión de cariño, y no ayudarlo también es un deber. Si tu amabilidad es demasiado, hará que la otra persona lo dé por sentado. Quien será agraviado serás tú mismo. Si quieres ser respetado por los demás, debes empezar por el respeto a ti mismo. De lo contrario, si ni siquiera te valoras a ti mismo, ¿por qué los demás te tomarán en serio?
Por supuesto, también hay un punto muy importante, es decir, debes ser capaz de asumir la responsabilidad de lo que dices y haces, y esforzarte por ser una persona que dice su palabra y actúa. Sólo así todos sabrán que eres una persona muy confiable y responsable, lo que favorecerá la armonía en las relaciones interpersonales.