¿Cuáles son tus valores?
¿Cuáles son tus valores? ¿Cómo puedes aclarar tus propios valores? Una herramienta muy útil es pensar en la persona que más admiras, hombre o mujer, viva o muerta. ¿Qué cualidades o características crees que son más importantes en estas personas? Si quisieras ser quien eres, ¿qué cualidades te gustaría más poseer en ellos? Mira a las personas que admiras a tu alrededor. ¿Qué cualidades crees que son las más importantes en estas personas? Cuando decides tener una relación cercana con alguien, ¿qué cualidades ves en esa persona? ¿Cuáles cree que son los principios fundamentales en los tratos comerciales y las relaciones personales con amigos? ¿Qué conceptos valoras? Si quieres ser una excelente persona debes pensar detenidamente y establecer tus propios valores. Los ingresos económicos y los logros personales de personas y empresas con valores claros suelen ser mucho más altos que los de personas y empresas con valores vagos. Hasta donde yo sé, casi todas las empresas considerarán la integridad como uno de los principios organizacionales más importantes. La definición del diccionario de la palabra integridad es: perfecta, inseparable, completa, consistente, sana, sin fallas ni defectos. Este es un buen valor. Es realmente bueno elegir la integridad como valor. En la vida real, la integridad es más que un simple valor. Es la cualidad psicológica de la integridad la que garantiza o asegura todos los demás valores que elijas. Para lograr un mayor éxito, primero debes aclarar tus valores. Depende de usted decidir en qué valores cree. ¿Qué apoyas? ¿Contra qué? ¿A qué valores te suscribes y por los que estás dispuesto a sacrificarte? ¿Por qué valores estás dispuesto a trabajar, trabajar duro e incluso morir? ¿Valoras la familia? ¿Preocupado por la salud? ¿Valoras tu trabajo o carrera? ¿Aboga por principios como la libertad, la liberación, la preocupación por los débiles o el respeto a la vida? ¿Cree en los principios de honestidad, verdad, sinceridad, trabajo duro y éxito? No importa cuáles sean tus valores, piensa con claridad y haz todo lo que hagas para ser coherente con esos valores. Cuando eliges un valor y lo identificas como uno de tus sistemas de valores, ese valor se vuelve sacrosanto. El acto de elegir valores es una declaración para ti mismo o para los demás sobre cómo vivirás tu vida de ahora en adelante. Una vez que identifica un valor y declara que será su código de conducta coherente, está declarando efectivamente que es un principio que nunca transigirá. El grado en que te adhieras a los valores elegidos es la verdadera medida de tu carácter y la calidad de tu conducta como persona. La confianza inquebrantable en uno mismo proviene de la adhesión a los valores. Cuando sepas en el fondo de tu corazón que nunca violarás tus principios más elevados, tendrás habilidades personales extremadamente fuertes, que te permitirán abrir tu corazón e interactuar con los demás sinceramente y con absoluta confianza en cualquier interacción interpersonal. Nadie es perfecto y todos tenemos un largo camino por recorrer viviendo nuestros valores más elevados. La integridad parece ser una necesidad para una vida exitosa. Ya sea en los negocios, la vida política o la vida personal, perder la integridad o comprometer los valores no sólo trae consigo un castigo como un delito, sino que también trae consigo una gran presión, depresión y tortura interior a la vida personal. La integridad absoluta requiere la capacidad de "vivir auténticamente" en todas sus interacciones con todas las personas y en todas las circunstancias. Vivir auténtico significa que nunca vives una mentira, significa que nunca comprometes tu integridad por un trabajo, dinero o relación, significa que siempre dices y haces lo que crees que es correcto, independientemente de las ganancias y pérdidas inmediatas que signifiques. No seas pretencioso y no te engañes a ti mismo ni a los demás.