Colección de citas famosas - Colección de máximas - Además del examen de ingreso a la universidad, ¿hay algo particularmente memorable sobre ti desde la escuela secundaria hasta la secundaria?

Además del examen de ingreso a la universidad, ¿hay algo particularmente memorable sobre ti desde la escuela secundaria hasta la secundaria?

Desde la escuela secundaria hasta la secundaria, hay muchas cosas que vale la pena recordar.

Era la primera vez que fui a un cibercafé en la escuela secundaria. En ese momento, fui a un cibercafé negro local, 1. Estaba muy preocupado en ese momento y seguí a mi amiguito. En el camino tenía especial miedo de encontrarme con conocidos y miré a mi alrededor. En ese momento, sólo tenía cinco yuanes en mi bolsillo, así que fui a un mercado matutino con mis amigos. Me arrastró directamente a una pequeña habitación privada y me llevó a jugar baloncesto callejero. Cuando jugaba, me temblaban las manos y estaba muy nervioso. Cuando salí, le mentí a mi familia diciéndole que iba a casa de otra persona a hacer la tarea. El olor a humo de cigarrillo en los cibercafés es muy fuerte. Después de jugar un rato, sentirás que el olor a humo te ahoga los ojos. Cuando me iba, encontré un chicle en mi trasero. Hice lo mejor que pude para deshacerme de él y me fui a casa. Pero el olor a humo de cigarrillo era demasiado fuerte, así que me cambié de ropa y me escondí de los ojos de mis padres.

Cuando estaba en la escuela secundaria, en nuestro grado se celebraba un partido de baloncesto. En ese momento participé en el concurso como miembro. Mis compañeros y yo ganamos el campeonato juntos. Yo era armador en ese momento y deliberadamente imitaba a mi ídolo Allen Iverson, y a menudo ganaba la casa con mi disfraz. Pero en ese momento era demasiado delgada, sólo pesaba 100 libras. Después de todo, el baloncesto es un deporte físico intenso. Me derribaron varias veces durante el juego y me lastimaron los brazos y las piernas varias veces. Yo tenía mucha energía en ese momento, así que simplemente lo solucioné y fui a competir de nuevo. Jugar contra la Clase 1 en la final fue el partido más difícil. En un momento estábamos diez puntos abajo, pero nuestro alto pívot empezó a perder los estribos. Seguimos dándole el balón y él jugó por dentro en el lado opuesto, lo que nos permitió adelantar. Al final quedó empate 30-30. Pasé el balón y metí el gran centro dentro. Un gancho puso fin a la pelea. En ese momento, junto con el director, lanzamos el gran centro al cielo.