Colección de citas famosas - Colección de máximas - ¿Puedes aceptar que tus hijos serán inferiores a ti en el futuro? Profesor de la Universidad de Pekín: Aprender a aceptar es bueno para todos.

¿Puedes aceptar que tus hijos serán inferiores a ti en el futuro? Profesor de la Universidad de Pekín: Aprender a aceptar es bueno para todos.

Recientemente, un vídeo del profesor de la Universidad de Pekín, Ding Yanqing, se volvió viral.

Ding Yanqing fue llamada "niña prodigio" cuando era niña. A la edad de 6 años, podía recitar todo el Diccionario Xinhua. Estudió en la Universidad de Pekín y luego fue a la Universidad de Columbia para realizar más estudios, donde obtuvo un doctorado en educación. Actualmente es supervisor de doctorado y profesor asociado en la Universidad de Pekín. Su esposa, Gao Fei, también se graduó en la Universidad de Pekín.

Sin embargo, la hija parece haber evitado perfectamente el gen de la hegemonía académica de la pareja. Después de ayudar a su hija con su tarea muchas veces, el profesor Ding experimentó un proceso de transformación del dolor a la duda sobre la vida y a la paz interior.

¿Puedes aceptar que tus hijos no serán tan buenos como tú en el futuro?

Para muchos padres, esta pregunta es una pregunta que llega directo al alma. Trabajan duro y ganan dinero, muchas veces para el buen desarrollo de sus hijos, pero la realidad puede ser que realmente "no eres tan bueno como yo", hijo.

Ante esta ansiedad, en las entrevistas, la mayoría de los padres afirmaron que lo más importante es que sus hijos estén sanos y felices. Algunos padres también expresaron que esperan que sus hijos tengan una vida mejor en "Shine on You" que en "Blue". Entonces, ¿cómo afrontar este problema?

Conocerse a uno mismo es más importante que conocer el mundo y adquirir conocimientos y habilidades. Nuestro objetivo educativo es que los niños adquieran tantas habilidades como sea posible, pero rara vez los animamos a pensar: ¿quién soy yo? ¿Para qué soy más adecuado? ¿Qué puedo hacer? ¿Qué me gusta más? Rara vez se anima a los niños a explorar y descubrirse a sí mismos.

La diferencia en la vida no es qué tan alto o rápido vuelas, sino cómo encontrar la posición que más te convenga. La depresión adolescente está aumentando ahora y se debe a este desajuste. Muchas personas eligen carreras y trabajos no basándose en sus propios intereses, personalidad y características, sino en carreras y trabajos que no les gustan. Nuestra educación no anima a los jóvenes a descubrirse a sí mismos, sino a escapar de sí mismos. La seguridad que conlleva seguir a la multitud es simplemente una falsa sensación de seguridad.

Tolstoi dijo: "Todas las familias felices son iguales, y cada familia infeliz tiene su propia desgracia". Las personas infelices son todas iguales, pero las personas felices lo son cada una a su manera. ¿Por qué? Porque los desafortunados toman el camino de otros, mientras que los felices encuentran otro camino. Sólo comprendiéndose a sí mismo y encontrando su singularidad podrá obtener una ventaja competitiva.

Cuando una persona se anima a descubrir sus propias fortalezas, maximizará su potencial en un área determinada. Cuando la mayoría de los niños compiten frente a los mismos estándares, muchos niños se vuelven mediocres debido a una falta de entusiasmo interior.

La libertad no es sólo un espacio, es una capacidad adquirida. El yo de cada uno es el resultado de una exploración constante y de prueba y error. El "yo" de nadie es el producto final de la adolescencia o de los 20 años. Todo el mundo es una piedra y tallé esta piedra en un hermoso jade. Este es el proceso de descubrirse a uno mismo.

Para perfeccionarte, habrá éxito y fracaso. Hoy nuestra sociedad está llena de éxitos, pero no hay "fracasos". La sociedad, los maestros y los padres guían constantemente a los niños hacia "donde hay voluntad, hay un camino". El éxito se basa en el momento, el lugar y la armonía adecuados, no en un entusiasmo vacío.

Nuestra educación no tolera el "fracaso". Pero el fracaso es la única manera de conocernos a nosotros mismos. Debido al fracaso, conocemos nuestros intereses y nuestras altas capacidades. Pero nuestra educación desprecia la renuncia y el fracaso. El fracaso es un mecanismo de señalización que nos recuerda que debemos pensar en dónde nos equivocamos. Rendirse es un mecanismo de limitación de pérdidas que nos recuerda si necesitamos cambiar nuestra forma de pensar. Conocerse a uno mismo es un proceso de prueba y error. Sin el coraje para fracasar, no habrá sorpresas en el descubrimiento.

La "visión errónea del fracaso" es una simplificación de los criterios de éxito. ¿Qué es el éxito? El éxito significa salir adelante, ganar más dinero, convertirse en un funcionario más importante... En resumen, si eres una persona común y corriente, fracasarás. Por eso la definición de éxito educativo de los padres es más importante.

Los padres pueden tener "nudos" en el corazón. He sido bueno estudiando desde que era un niño. ¿Por qué no mi hijo?

En primer lugar, la mayoría de nosotros somos gente corriente. Al darse cuenta de esto, el niño es un individuo independiente. Aunque la mayoría de las personas pueden tener talentos promedio, cada niño tiene su propia personalidad y pasatiempos únicos. La misión de un padre es ayudar a sus hijos a encontrar lo que aman y esa singularidad. El concepto correcto de educación es que los padres deben ayudar a sus hijos a establecer un concepto correcto del éxito y el fracaso.

En segundo lugar, el proceso de crecimiento de los niños es inseparable de sus propios desafíos valientes y de sus valientes pruebas y errores. Los padres también deben atreverse a dejarse llevar, dar espacio libre a sus hijos y permitir sus errores y fracasos. Al final, el carácter es el destino. Los padres no sólo deben cultivar niños con un alto coeficiente intelectual, sino también niños con una alta inteligencia emocional.

Para los niños, la parte principal del crecimiento es "conocerse a sí mismo, descubrirse a sí mismo y desafiarse a sí mismo". Al mismo tiempo, el papel principal de los padres es "comprender a sus hijos, aceptarlos y animarlos". La educación de los padres no sólo puede crear un ambiente relajado y feliz para que los niños crezcan, sino también ayudarlos a encontrar la posición que más les convenga.