Poesía asiática original
Miles de millas para encontrar la vela una y otra vez.
Avanzar con ganas una y otra vez.
El corazón es como un campo seco.
Ora por la lluvia.
Pero marcamos el comienzo de la antorcha de los Juegos Asiáticos.
¿Cómo se puede arder sin llama?
Quema mi corazón y mis sueños.
A mí especialmente me sonroja.
Quiero cantar, quiero gritar.
La antigua nación china
un día demostrará su valía.
El nombre "Enfermo del Este de Asia"
ha sido arrojado al abismo del Océano Pacífico.
Hijos e hijas chinos excepcionales
Valor, tenacidad y encanto infinito.
Unidad, amistad y progreso
3.300 millones de asiáticos están conectados entre sí.
¡Ay! Hermosa China
¡Oh! Hermosa Asia
En segundo lugar,
Hay invitados dignos de todo el mundo.
De todas partes
De todo el mundo
De todos los rincones de Asia
Diferentes colores de piel, diferentes idiomas, diferentes culturas
Lo que sigue deteniéndose es el monólogo de la lucha.
Las palmas fuertes son apretadas y poderosas.
Los cantos y las risas resonaron en todo el mundo.
La marea de la amistad está aumentando.
Es como si un dique hubiera reventado y las olas estuvieran surgiendo
Inundando la membrana del tiempo anterior.
Rompe la estrechez de ayer
¡Oh! Niños chinos de buen corazón
¡Oh! Sports Asia
Tercero,
En el campo ondeaba la bandera.
Los deportistas se encuentran de buen humor.
El pasado estuvo lleno de sudor.
El sueño de hoy de galopar
Este es un choque de almas.
Esta es una batalla de fuerza.
Bronce, Plata y Oro
Más alto, más rápido y más fuerte.
¿O una infancia interesante?
Tener el sueño de ganar el campeonato.
La brillante medalla de oro cuelga del pecho.
Me eché a llorar.
Mirando fijamente la bandera nacional ondeando.
Escucha el himno nacional.
Vivir en la tierra de China
Reflexiones sobre las alas del vuelo.
Hacia la dirección de la patria
Abraza el sol dorado
¡Oh! Descendientes del Dragón
¡Oh! Avanzando en Asia
Cuarto,
Desde el encendido de la llama de los Juegos Asiáticos
Respetar el cielo que cae.
Ríos y montañas desde China
A las grandes llanuras donde se reúnen las águilas.
Cada día está lleno de alegría mágica.
Ven con esperanza y regresa con la cosecha plena.
Esta es una victoria para los Juegos Asiáticos.
Esta es la expectativa de la vida humana.
Dile adiós al ayer y mira el presente.
El espíritu de autotrascendencia y lucha continua se transmitirá para siempre.