Un ensayo de 800 palabras titulado "La erudición en la juventud"
Podemos imaginar cuánto sudor y lágrimas hay en cada medalla. En la combinación de fuerza y belleza, mostraron el estilo del pueblo chino, compusieron páginas de canciones heroicas y crearon un milagro asombroso tras otro. Todo esto se debe al espíritu de los Juegos Asiáticos: trabajo duro, perseverancia y fe, que hace que los atletas perseveren y sigan adelante, y hace que las medallas en sus pechos sanen y brillen con el telón de fondo de la bandera roja de cinco estrellas.
Ahora somos estudiantes. Aunque no podemos galopar en el campo como atletas, el espíritu de los Juegos Asiáticos es eterno y será el motor que nos impulse a seguir adelante. No importa cómo cambien los tiempos ni cómo cambien los años, éstas serán la riqueza eterna que muestra el encanto de la naturaleza humana en la vida.
Se puede decir que estudiar en la secundaria es como un maratón, tortuoso y arduo. Hubo lágrimas, risas, frustraciones y gloria en el camino. Pero mientras la fe siga ahí, el espíritu siga ahí y no haya dificultades que no puedan superarse, te ayudará a avanzar cada vez más en el camino del aprendizaje y a volverte más estable. Ahora, nuestros estudiantes de graduación han corrido más de la mitad de la distancia y han entrado en la etapa de sprint. Incluso si el sudor ha empapado nuestra ropa y ha agotado nuestro cuerpo y nuestra mente, debemos perseverar y nunca retroceder en el momento más crítico, con lágrimas en la cara y un fino sudor en la frente.
¡Sigue tu espíritu! La vida es una lucha que ocurre una vez en la vida. Ahora el viento simplemente navega y el barco de la esperanza se aleja con nuestros sueños. ¡El próximo junio espero que todos podamos obtener nuestra propia medalla, heredar el espíritu de los Juegos Asiáticos y crear una mayor gloria!