Un poema llamado Cuento de hadas de Guo Feng.
En el reino de los cuentos de hadas, soy mi propio rey.
Mirando la interminable pradera.
Caballo sin Riendas
Sumérgete en un exuberante oasis.
La niña en mí
Florece como una flor mientras canto.
Esa cara tímida
Esa falda de baile
La danza mágica se convirtió en canto eterno.
El cielo azul se ha maquillado de nuevo.
La luna nos mira con cariño.
Nos abrazamos con ojos afectuosos.
El tiempo se detiene en este momento.
La felicidad golpea nuestro corazón como electricidad.
La realidad siempre incide en la dirección de los sueños.
Los cuentos de hadas pueden ser sólo ideas de la infancia.
La vida está llena de altibajos.
El destino está destinado a luchar por un viaje impotente
La madurez acabará dejando vicisitudes en nuestro rostro.
Cuando abramos los ojos, haremos las maletas para toda la vida.
Perdí la capacidad de llorar y reír al mismo tiempo
Pero aprendí a reír y llorar.
Finge sonreír cuando estés perdido.
Date la vuelta y sana silenciosamente en la oscuridad.
En la desolación de la noche
El aliento y el temblor están ahí
El daño doloroso y extendido