No gastes dinero indiscriminadamente.
Ganar dinero todos los días no es tan bueno como tener una familia que vale decenas de millones.
La diligencia nunca es escasa y no se puede hacer nada.
Las personas inteligentes saben prepararse para el futuro y no ponen todos los huevos en la misma cesta.
Las personas que escatiman en alimentos y ropa pueden superar fácilmente las dificultades cuando son pobres; las personas que son extravagantes en riqueza morirán de hambre y de frío en la pobreza.
El éxito es como recoger tierra, y el fracaso es como olas en la arena.
Si no ahorra poco dinero, se desperdiciará mucho dinero.
No tires las cosas acumuladas en cubos.
Si puedes comer, haz miles de comidas; si no puedes, haz solo una comida.
Ten cuidado con tu presupuesto y ten suficiente comida y ropa; come y bebe, vende ollas para vivienda.
La frugalidad es un festín inagotable en tu vida.
Es difícil pensar en una papilla y una comida, pero es difícil pensar en ello todo el tiempo.