No te atrevas a decir adiós
El tiempo vuela muy rápido y ya me voy de este lugar en un abrir y cerrar de ojos. Este lugar no es mi ciudad natal, pero es un lugar donde he vivido durante mucho tiempo. Aquí están mis mejores recuerdos, mis experiencias más inolvidables y mis amigos más queridos. No me atrevo a despedirme cuando salga de aquí.
Preparativos antes de partir
Antes de partir, necesito hacer algunos preparativos. Lo primero es hacer las maletas. Clasifica todos los artículos en categorías y coloca los artículos que necesitas llevar en tu maleta. Este proceso me recuerda cada día que he pasado aquí. Cada elemento tiene su historia y cada elemento es mi testimonio aquí.
Entonces llegó el momento de despedirse de los amigos. Este fue el paso más difícil porque no quería dejarlos. Hemos pasado muchos momentos maravillosos juntos y compartido tanta alegría y tristeza. Sin embargo, sabía que tenía que irme para perseguir mis sueños y encontrar un mundo más amplio.
El dolor de decir adiós
La despedida es algo doloroso. Cuando me despedí de mis amigos, mi corazón se llenó de desgana y nostalgia. No quiero irme de este lugar, no quiero dejar a mis amigos. Sin embargo, sabía que tenía que ir y encontrar un futuro mejor.
Cuando me despedí, no me atrevía a mirar a mis amigos a los ojos. Tengo miedo de ver sus lágrimas y tengo miedo de que mis lágrimas también fluyan hacia abajo. Sólo puedo decirles en silencio que los extrañaré y que siempre apreciaré el tiempo que pasamos juntos.
Final
Ahora, me he ido de este lugar. Comencé una nueva vida en una nueva ciudad. Pero siempre tendré este lugar en mi corazón. No me atreví a despedirme porque sabía que volvería. Volveré para ver a mis amigos, volveré para ver este lugar, volveré para recordar nuestro tiempo juntos. No me atrevo a despedirme porque sé que nuestra amistad nunca terminará.