No pienses siempre en los demás.
Lo que experimento es lo que elijo. Siempre pienso en los demás, pero me equivoco. No es culpa de nadie más que mía. Todavía soy joven y es hora de aprender lecciones. Lo único que sé es que no quiero vivir la vida que tenía antes y no quiero ser una “buena persona” a los ojos de los demás. No le debo nada a nadie y nadie me debe nada. Poco a poco aprenderé a expresarme de forma adecuada. No quiero esconder todas las palabras en mi corazón y volverme cada vez más feroz...
Porque eres un poco mayor y un poco más maduro Muchas cosas siempre son consideradas por los demás. pero otros piensan que tú lo hiciste. Nada importa. ¡Nunca pienses en los demás y vive tu vida!
No pensar siempre en los demás, hacer felices a los demás y equivocarse uno mismo. Con el tiempo, esas personas darán por sentado sus esfuerzos. Cuando estés cansado, nadie se compadecerá de ti.
A veces hay que ser egoísta. No hay necesidad de pensar en los demás en todo, lo cual es ingrato. ¿Quién no es un recién llegado? ¿Por qué debería sentirse agraviado?
Siempre pensaré más en los demás, pero en el futuro pensaré más en mí mismo. Nadie puede equivocarse a sí mismo, ¿verdad?
Vive una vida egoísta, no seas tan duro contigo mismo, no te hagas daño ni te pierdas.