transformación
Transformación, transducción, transfección e infección son cuatro técnicas para introducir genes extraños en células receptoras en experimentos de biología molecular. Sus formas verbales son similares y conceptualmente se confunden fácilmente. Diferencias específicas: diferentes significados, diferentes usos y diferentes énfasis.
1. Diferentes significados
(1) Transformación: los plásmidos recombinantes (vectores) que contienen genes extraños introducen directamente genes extraños en células procariotas (como bacterias).
(2) Infección: En los experimentos de transferencia genética se enfatiza el proceso de invasión de las células receptoras por vectores virales recombinantes.
(3) Transducción: introducción de genes extraños en células eucariotas o procarióticas mediante vectores virales recombinantes.
(4) Transfección: se refiere a la introducción de vectores plásmidos recombinantes o nucleótidos libres en células eucariotas a través de liposomas y otros medios.
2. Diferentes usos
(1) Transformación: Cuando el vector es un plásmido recombinante, se debe utilizar "transformación" si la célula receptora es una célula procariótica.
(2) Infección: Si la célula receptora es una célula eucariota, se utiliza la "transfección".
(3) Transducción: Cuando el vector es un virus recombinante se debe utilizar "transducción" si se enfatiza que el material transferido entre en la célula receptora.
(4) Transfección: Para enfatizar el proceso por el cual el vector viral recombinante ingresa a la célula receptora, se utiliza "infección".
3. Diferentes enfoques
(1) Transformación: Lo que se transforma en la célula receptora es un fragmento de ADN cromosómico o ADN plasmídico.
(2) Infección: Lo que entra en las células durante el proceso de transfección es ADN viral completo.
(3) Transducción: El ADN o ARN de una célula se transfiere a otra célula mediante la infección con un vector viral.
(4) Transfección: Trate las células de E. coli con cloruro de calcio para aumentar la permeabilidad de la membrana celular, de modo que las moléculas extrañas de ADN puedan ingresar fácilmente al interior de la célula.