¿Cuál es la definición de salud de la OMS?
Ya en 1948, la OMS señalaba en su carta que “la salud no es sólo la ausencia de enfermedades y dolencias, sino también la ausencia de enfermedades físicas, mentales y sociales”. El perfecto estado de función. "
En 1990, la OMS definió la salud como: salud física, salud mental, buena adaptación social y salud moral. El contenido de la salud moral se refiere a la incapacidad de perjudicar los intereses de los demás para satisfacer las propias necesidades, la capacidad de contenerse y controlar los propios pensamientos y comportamientos de acuerdo con la ética conductual reconocida por la sociedad, y el concepto y capacidad de distinguir la verdad, el bien y el mal, el honor y la desgracia.
Según las mediciones, las violaciones de la ética social a menudo conducen a psicología negativa, como tensión y miedo, y son propensas a trastornos del centro nervioso y del sistema endocrino, y también disminuyen las capacidades de defensa del sistema inmunológico. . Los científicos médicos han descubierto que las personas que aceptan sobornos son propensas al cáncer, hemorragias cerebrales, enfermedades cardíacas y alergias mentales; las cualidades de integridad, bondad, indiferencia y magnanimidad pueden mantener a las personas equilibradas y contribuir a una buena salud.
En los últimos años, algunos estudiosos creen que el estatus económico debería ser un contenido básico de la evaluación de la salud. Dado que las personas son un todo muy complejo e integral, la salud humana también abarca múltiples dimensiones.
Existen estándares claros para la salud física, como el crecimiento y desarrollo, la madurez y el envejecimiento. , más cuantitativamente hablando, es temperatura corporal 36 ℃ -37 ℃, presión arterial: presión baja 60-90 mmHg, presión alta 90-130 mmHg, frecuencia cardíaca 60-80 latidos/minuto, estos son indicadores normales del movimiento fisiológico humano.
Sin embargo, debido a la influencia del entorno social y cultural, los estándares de salud mental son bastante vagos. Pero la salud mental juega un papel destacado en el código de conducta de las personas. Frente a la colorida vida, sólo una mentalidad sana puede adaptarse a diversos entornos y manejar diversas cosas.
La salud mental es un buen estado mental. En este estado, las personas no sólo tienen una sensación de seguridad y un buen estado de sí mismas, sino que también viven en armonía con la sociedad y pueden adaptarse al entorno externo de una forma socialmente reconocida. En términos generales, puede entenderse como estabilidad emocional y madurez psicológica, pero este estado estable y maduro es relativo. Debido a que vivimos en una sociedad donde todo está cambiando, nadie tiene un estado mental y emocional fijo. Sólo cuando todas las condiciones que restringen la personalidad, como la educación, la capacidad laboral, la ocupación, el estatus social, la evolución de la vida, etc., están bien coordinadas y pueden adaptarse al entorno, utilizar el entorno y crear el entorno, se puede llamar salud mental.
Algunos psicólogos rompen con las limitaciones de los estándares abiertos y describen a las personas las características de una persona mentalmente sana: es una persona enérgica y feliz, amada y confiada que enfrenta los desafíos de la vida; afrontar, dedicarse al trabajo con entusiasmo y aprovechar todo su potencial; ser capaz de conocer el mundo exterior, responder a los desafíos encontrados y formular estrategias de vida razonables; no exagerará ni menospreciará sus propias habilidades; tenga confianza en usted mismo y en sus Las evaluaciones de los demás se basan en la realidad. Si eres el tipo de persona descrita anteriormente, entonces estás mentalmente sano.
Freud, pionero en explorar los misterios de la psique humana, atribuía la salud mental a la capacidad de amar y trabajar. En un libro enumeró algunas características comunes de las personas mentalmente sanas: mantener la cordura y el equilibrio; tener un sentido de autoestima; tener la capacidad de establecer y mantener relaciones cercanas; ser capaz de aceptar diversas posibilidades; posibilidades en la realidad; la búsqueda de un trabajo es coherente con el talento y la formación académica; la capacidad de experimentar una cierta paz interior y satisfacción, haciéndose sentir que esta vida no ha sido en vano.
Si la salud mental debe atribuirse a ciertos estándares, los académicos nacionales y extranjeros generalmente creen que existen 11 estándares para la salud mental. Las personas que básicamente cumplen con estos 11 estándares pueden considerarse personas mentalmente sanas.
1. Tener una moderada sensación de seguridad, tener autoestima y sentirse "valioso" consigo mismo y con sus logros personales.
2. Conócete plenamente a ti mismo, no presumas demasiado y no seas demasiado duro contigo mismo.
3. En la vida diaria tiene espontaneidad y sensibilidad moderadas y no se deja esclavizar por el entorno.
4. Aceptar adecuadamente las necesidades personales y tener capacidad para satisfacerlas.
5. Ser consciente de sí mismo, conocer sus propias motivaciones y propósitos, y realizar estimaciones adecuadas de sus capacidades.
6. Mantener un buen contacto con el entorno real, tolerar los contratiempos y los golpes de la vida y no hacerse ilusiones excesivas.
7. Puede mantener la integridad y armonía de la personalidad, puede cambiar los valores personales de acuerdo con diferentes estándares sociales y tener una buena comprensión de uno mismo.
Trabajar puede ayudarte a concentrarte.
8. La vida tiene un propósito realista y la mayoría de las profesiones que desempeña un individuo son trabajos prácticos y factibles.
9. Tener la capacidad de aprender de la experiencia, adaptarse a las necesidades del entorno y cambiar uno mismo.
10. Capaz de establecer relaciones armoniosas con otros miembros del grupo y prestar atención a las necesidades del grupo.
11. Sin violar los principios colectivos, puedes mantener tu propia personalidad, tener un punto de vista independiente, tener la capacidad de juzgar el bien y el mal, el bien y el mal, no halagar excesivamente a los demás y hacerlo. No buscar excesivamente la aprobación social.